LA DISFAGIA EN NIÑOS: CAUSAS, SÍNTOMAS Y TRATAMIENTO INTEGRAL

La disfagia en niñ@s representa un desafío sumamente complejo que ejerce un impacto considerable en la calidad de vida tanto de los pequeños afectados como de sus familias. En este artículo, nos sumergiremos en un análisis profundo y meticuloso de las múltiples facetas de este trastorno.

Exploraremos con detenimiento las diversas causas que subyacen a su aparición, examinaremos en profundidad los síntomas que caracterizan su manifestación y exploraremos las amplias gamas de opciones terapéuticas disponibles para abordar este desafío de salud pediátrica.

¿Qué es la Disfagia?

La disfagia es un trastorno complejo que va más allá de la mera dificultad para tragar alimentos de manera efectiva. Se manifiesta en una amplia gama de casos, abarcando desde recién nacidos prematuros hasta adolescentes con condiciones neurológicas. Esta diversidad de contextos clínicos y edades nos muestra la complejidad y la variabilidad de la disfagia.

Disfagia en recién nacidos

En los recién nacidos prematuros, la disfagia puede estar relacionada con la inmadurez de los sistemas neurológicos y musculares involucrados en el proceso de deglución. Los bebés que nacen antes de tiempo pueden experimentar dificultades para coordinar los movimientos necesarios para tragar de manera eficaz, lo que puede ponerlos en riesgo de aspiración y otras complicaciones.

Disfagia en adolescentes

En niñ@s de más edad, especialmente aquellos con condiciones neurológicas como parálisis cerebral o trastornos del desarrollo, la disfagia puede ser el resultado de una combinación de factores. Las alteraciones en la función muscular, la sensibilidad oral y la coordinación neuromuscular pueden contribuir a las dificultades para tragar alimentos sólidos y líquidos de manera segura.

Además, la disfagia puede presentarse de diferentes maneras en función de la causa subyacente y la gravedad del trastorno. Algunos niñ@s pueden experimentar dificultades para iniciar el proceso de deglución, mientras que otros pueden tener problemas para controlar el paso de los alimentos a través de la faringe y el esófago. Estas variaciones en la presentación clínica hacen que el diagnóstico y el tratamiento de la disfagia sean desafiantes y requieran un enfoque individualizado y multidisciplinario.

¿Cuáles con las causas Subyacentes de la Disfagia en Niñ@s?

Entre los motivos que causan la disfagia se encuentran:

• Factores neurológicos: Entre las causas neurológicas encontramos condiciones como la parálisis cerebral, los trastornos del desarrollo y las lesiones cerebrales traumáticas pueden provocar disfunciones en los nervios que controlan la deglución. Esto puede dar lugar a dificultades para coordinar los movimientos musculares necesarios para tragar de manera efectiva, lo que puede comprometer la capacidad del niñ@ para alimentarse adecuadamente y aumentar el riesgo de aspiración y neumonía por alimentos o líquidos inhalados. En adultos mayores puede aparecer disfagia cuando se presentan problemas neurológicos desencadenador por traumatismos craneoencefálicos (TCA) o enfermedades neurodegenerativas como las enfermedades de Alzheimer o Parkinson.

• Malformaciones Anatómicas: Las malformaciones anatómicas del tracto digestivo pueden obstaculizar el paso adecuado de los alimentos a través del sistema digestivo. Estas anomalías pueden afectar cualquier parte del tracto digestivo, desde la boca hasta el esófago y el estómago, y pueden variar en gravedad desde anomalías menores hasta defectos estructurales más graves que requieren intervención quirúrgica.

• Factores Ambientales y Conductuales: La aparición y persistencia de la disfagia no solo está determinada por causas médicas y neurológicas, sino que también puede influir de manera significativa por factores ambientales y conductuales. Estos factores pueden desempeñar un papel crucial en la capacidad del niñ@ para tragar de manera efectiva y segura. Algunos de los factores ambientales y conductuales pueden ser:
  • La alimentación inadecuada es uno de los factores ambientales más relevantes que pueden contribuir a la disfagia en niñ@s. La falta de una dieta equilibrada y nutritiva puede afectar negativamente la función muscular y la coordinación necesaria para una deglución adecuada. Además, la ingesta insuficiente de líquidos y nutrientes puede aumentar el riesgo de desnutrición y complicaciones relacionadas.
  • La falta de apoyo durante las comidas también puede ser un factor importante. Los entornos alimentarios estresantes o caóticos pueden dificultar la capacidad del niñ@ para concentrarse en el proceso de alimentación y deglución, lo que aumenta el riesgo de atragantamiento y aspiración.
  • La ansiedad relacionada con la ingesta de alimentos es otro factor conductual que puede desempeñar un papel significativo en la aparición de la disfagia en niñ@s. El miedo o la ansiedad asociados con experiencias previas de atragantamiento o dificultades para tragar pueden llevar a una evitación de ciertos alimentos o a comportamientos de alimentación desordenados, lo que perpetúa el ciclo de disfagia y estrés durante las comidas.

Las causas neurológicas y las malformaciones anatómicas del tracto digestivo son dos de los principales desencadenantes de la disfagia en niñ@s. Este complejo trastorno pues puede surgir como resultado de una variedad de condiciones médicas que afectan el funcionamiento del sistema nervioso y la estructura física del sistema digestivo.

En muchos casos, la disfagia en niñ@s es el resultado de una combinación de factores neurológicos y anatómicos, sin embargo, no debemos dejar de atender los factores contextuales que rodean esta dificultad; lo que hace que su diagnóstico y tratamiento sean particularmente desafiante. Es fundamental realizar una evaluación exhaustiva de cada niñ@ afectado para identificar las causas subyacentes de su disfagia y desarrollar un plan de tratamiento personalizado que aborde sus necesidades específicas.

Además del tratamiento médico y quirúrgico dirigido a corregir las anomalías anatómicas y/o neurológicas subyacentes, es esencial proporcionar terapia de rehabilitación y apoyo nutricional para ayudar a desarrollar habilidades de deglución seguras y eficaces. Un enfoque multidisciplinario que involucre a pediatras, gastroenterólogos, otorrinolaringólogos, logopedas y otros especialistas de la conducta como psicólogos o terapeutas ocupacionales, es fundamental para garantizar una atención integral y mejorar los resultados a largo plazo.

Disfagia, Autismo y otras Neurodivergencias

La disfagia presenta una mayor prevalencia en niñ@s diagnosticados con trastornos del espectro autista  entre otras condiciones del desarrollo. Esta condición plantea un desafío adicional en el manejo de la disfagia, ya que las dificultades sensoriales, motoras y de comunicación características de las neurodivergencias puede complicar aún más el proceso de deglución y alimentación en esta población pediátrica.

L@s niñ@s con trastornos del espectro autista suelen experimentar sensibilidades sensoriales atípicas que pueden afectar su percepción y tolerancia a diferentes texturas y sabores de alimentos. Esto puede llevar a una selección limitada de alimentos y dificultades para aceptar nuevas texturas o alimentos menos familiares, lo que a su vez puede aumentar el riesgo de desnutrición y otras complicaciones relacionadas con la alimentación.

Además, las dificultades motoras asociadas con los trastornos del espectro autista pueden afectar la coordinación de los movimientos necesarios para masticar y tragar los alimentos de manera eficaz. L@s niñ@s con problemas motores pueden tener dificultades para controlar la masticación y la manipulación de los alimentos en la boca, lo que puede aumentar el riesgo de atragantamiento y aspiración durante las comidas.

Por otro lado, las dificultades de comunicación pueden obstaculizar la capacidad de expresar sus necesidades y preferencias alimentarias, lo que puede dificultar la identificación de los desencadenantes de la disfagia y la implementación de estrategias de tratamiento adecuadas. Esto resalta la importancia de un enfoque multidisciplinario que incluya a terapeutas del habla y el lenguaje, así como a otros profesionales de la salud, para abordar las necesidades complejas de l@s niñ@s con trastornos del espectro autista y disfagia.

¿Cuáles son las manifestaciones Clínicas de la Disfagia en Niñ@s?

La disfagia en niñ@s se presenta de manera variada, y sus manifestaciones dependen en gran medida de la causa subyacente y la severidad del trastorno. Los síntomas pueden abarcar desde dificultad para tragar hasta complicaciones más serias que afectan la alimentación y la calidad de vida de los afectad@s.

Entre los síntomas más comunes de la disfagia se incluyen la dificultad para tragar alimentos sólidos y líquidos de manera efectiva, lo que puede manifestarse en episodios de tos o atragantamiento durante las comidas. Estos eventos pueden ser angustiantes tanto para menor como para sus cuidadores, y pueden llevar a una aversión a la alimentación y la ingestión insuficiente de nutrientes esenciales para el crecimiento y el desarrollo adecuados.

La regurgitación nasal es otro síntoma frecuente de la disfagia en niñ@s, y puede ocurrir cuando los alimentos o líquidos no se tragan adecuadamente y se desplazan hacia las vías respiratorias superiores, causando malestar y dificultando aún más el proceso de alimentación.

La pérdida de peso inexplicada es una preocupación importante en niñ@s con disfagia, ya que puede indicar problemas subyacentes con la ingestión de alimentos y la absorción de nutrientes. Pueden experimentar dificultades para mantener un peso saludable y mostrar signos de desnutrición si la disfagia no se trata adecuadamente.

Además, muchos niñ@s con disfagia pueden mostrar aversión o rechazo hacia ciertos alimentos sólidos o líquidos, lo que puede dificultar aún más la satisfacción de sus necesidades nutricionales y el mantenimiento de una dieta equilibrada y variada.

De modo que los siguientes pueden ser síntomas de disfagia:

• Aversión hacía los alimentos y/o momentos de la comida.
• Dificultad o dolor al tragar
• Nauseas
• Sensación de atragantamiento
• Tos
• Regurgitación
• Reflujo o acidez
• Voz ronca o débil
• Bajada de peso

¿En qué consiste la Evaluación Diagnóstica de la Disfagia en Niñ@s?

Evaluación y Diagnóstico Preciso

La evaluación diagnóstica de la disfagia en niñ@s es un proceso fundamental que nos permite comprender las necesidades específicas de cada paciente. Trabajamos en estrecha colaboración con un equipo multidisciplinario de especialistas.

Se pueden realizar distintos tipos de pruebas para diagnosticar la disfagia dependiendo de los síntomas:

• Entrevista y Estudio dinámico de la anatomía orofacial y de la deglución.
• Evaluación endoscópica con endoscopio, una pequeña cámara que graba cómo pasan los alimentos a través de la garganta (para esta prueba ser suele usar un sedante). Puede ser que tomen también una muestra llamada biopsia para examinar el estado interno del tubo digestivo.
• Evaluación por rayos X. Para esta prueba, se deben tomar alimentos con un colorante que hará que se puedan visualizar ciertas partes de la anatomía en una radiografía especial que rastrea en tiempo real el recorrido del alimento.

¿Cuál es el Tratamiento de la Disfagia en Niñ@s?

En función del tipo de disfagia será necesario uno u otro tratamiento.

• Disfagia orofaríngea: El profesional que debe encargarse de este tipo de disfagia es el logopeda, que desarrollará ejercicios para el aprendizaje de la coordinación de los músculos y estimulará los nervios reflejos encargados de la deglución. Te enseñará a colocar los alimentos y las posturas del cuerpo de forma que facilite todo el proceso.
• Disfagia esofágica: En este caso, dependiendo de la causa, se tratará de darle flexibilidad o dilatar el esófago, controlar el reflujo mediante medicación, o  elaborar una dieta apropiada.
• Disfagia grave: Si el caso es muy grave, puede ser necesario la alimentación a través de sonda o la cirugía.

En Neurolucion & Harmony, te ayudamos en la parte del proceso que requiere de la intervención de logopedia y/o psicología para que el tratamiento pueda ser integral y lo más eficiente posible. Nuestros profesionales abordan la disfagia en niñ@s de forma cercana y lúdica, para que el tratamiento les resulte le más agradable posible. Nuestro enfoque de tratamiento se adapta a las necesidades individuales con el objetivo de mejorar la coordinación, la fuerza muscular y la respiración. Nos esforzamos por proporcionar un tratamiento integral que promueva la seguridad y la eficacia de la deglución.

La disfagia es un trastorno complejo que puede afectar significativamente la salud y calidad de vida del niñ@ y su familia, por ello trabajamos en equipo para atender no solo los aspectos físicos de la disfagia, sino también los aspectos emocionales y sociales.